Una persona maravillosa

Hoy voy a hablaros de una persona maravillosa. No es su cumpleaños, no ha sido un día especial para él, ni siquiera lo he visto hoy... pero no necesito un motivo para saber y decir que es la persona más buena que he conocido en toda mi vida. De hecho, creo que no hay persona comparable a ese nivel que yo haya conocido.
Su tranquilidad y serenidad hacen que todo cuanto hace calme a toda persona que tiene a su alrededor. Su buena intención hace que todos queramos ser mejores personas. Su capacidad de superar día a día su enfermedad hace que todos nos sintamos capaces de superar todos y cada uno de los problemas que tenemos. Siempre intenta que veamos las cosas como algo bueno, que cada problema sea un poco más pequeño de lo que en realidad es, que mejoremos, aunque para él no hay nadie malo en el mundo, todo es bondad y alegría. Siempre ve la parte positiva de todo. Siempre ayuda con lo que tiene en su mano, incluso a veces, intenta ayudar con más de lo que puede y, estoy segura de que si tuviera más en sus manos haría mucho más. Todo lo que hace lo hace por su familia. Es como una especie de bendición tenerlo cerca y es una alegría verlo cada día con nosotros. Y me alegro mucho de haber estado cerca cuando él, por una vez, me necesitó y no al contrario. Nunca podría haberme perdonado a mí misma no haber estado con él. Sé que con ayuda de todos nosotros superó lo más difícil a lo que se había enfrentado nunca y por eso me alegro, porque nos mantuvimos unidos para ayudarlo, para apoyarlo y para hacerle ver que sin él, todos somos normales y con él, todos somos mejores.
Así que, creo que hablo en nombre de todos y no sólo mío, cuando digo que mi tío Juan Luis es una persona maravillosa.
Te queremos.