Cosas que me encantan (parte IV)

Les madeleines longues que me recuerdan a mi tía Praxedes. Las frases de películas. El cartel de Metropolitain al salir del Metro. Que se me taponen los oídos en el avión. La forma de convencer que tienen los chicos en el Sacre Coeur para que les compre pulseras. Que me llamen “Carla Bruni comme la femme du président” cada vez que digo mi nombre. Ser la única que sabe cómo acaba mi libro. La parte de dentro del Chococlack (odio cuando alguien muerde esa última capa, cuando has tenido toda la paciencia del mundo para llegar hasta ella). Pisar charcos con botas de agua. Seguir escuchando a Alejandro aunque pasen años. Lamer el plato después de comer un flan de huevo con caramelo. Cuando reparten comida en la plaza y vamos toda la familia a que nos den de comer botifarres i llonganisses, sandía o caldereta. Escribir en la primera y la última hoja de un cuaderno en blanco. Imaginar situaciones en las que me encuentro con alguien especial. Cuando el reloj marca las 00:00, las 11:11, las 01:23 o las 12:34. Recordar cuando Santi y yo cantábamos canciones de OT. Morder las Butterkeks entre las letras. Escuchar las diferentes versiones de una misma canción. El ruido de las tijeras al cortar el pelo. Recordar a mis primas en Alemania pellizcándome cada vez que veían un Smart, y diciendo Smart eins, zwei, drei cuando era negro y plateado (yo estuve un tiempo haciéndolo en Valencia :P). Olvidarme de que el agua que sale de la esponja está fría. Las noches de chicas viendo Sexo en Nueva York. Cantar con Lucía. Cocinar para los demás. Las películas “sóloparatelevisión” de los domingos por la tarde. Las palomitas con mantequilla. Preparar fiestas de cumpleaños. La frescura de las sandías en verano. Decir algo a la vez que otra persona. Los New Beattles. Mirar a las parejas mayores bailar en las fiestas del pueblo. Las casetas. Encontrar dinero en el bolso o en la ropa por sorpresa. Las sábanas recién lavadas. Tener un ataque de risa. Subir al contrario las escaleras mecánicas. Pasear por Père Lachaise. Jamiroquai. Que toda mi cocina se sustente gracias a un sacacorchos. Soñar seguido. 

¿Continuara?...